viernes, 23 de abril de 2010

Guilin (parte II)

Al montar en el bus, descubri que mi buena suerte estaba de nuevo conmigo: era un autobus con camas! Camas para chinos, eso si, pero horizontales al fin y al cabo. Y ahi no quedo la cosa. En el autobus conoci a Selina, una china muy maja, que vivia en Guangzhou e iba a pasar unos dias a Guilin y que inesperadamente se convirtio en mi nueva compañera de viaje.

Asi, a la mañana siguiente llegabamos a Yangshuo, donde navegamos el rio Li en una embarcacion de bambu, rodeados de colinas a ambas orillas del rio, en lo que es uno de los paisajes mas pintorescos del sur de China. El dia no era de los mas soleados, sin embargo, ni la niebla ni la lluvia consiguieron arruinar del todo la belleza del lugar.


Por la tarde visitamos Shangri-La, una especie de pequeño parque tematico donde tras un breve viajecito en una barca te muestran las diversas obras artesanales de la cultura local. Todo un poco montado de cara a la galeria, pero suficientemente entretenido para pasar la tarde.


Al dia siguiente, ya en la ciudad de Guilin, volvimos a navegar el rio Li (esta vez en un barco mas grande) para visitar alguno de los puntos de interes de la ciudad. Tambien fuimos a la Cueva de la Flauta de Caña, una cueva inmensa con un lago interior y en la que se pueden encontrar curiosidades como las estalagtitas practicamente descolgadas del techo que se ven en la foto.



A la tarde, Selina se encargo de encontrar el bus correcto que me llevara de vuelta a Shenzhen directamente. La verdad es que mi viaje resulto mucho mas sencillo gracias a ella y, ademas, con su compañia pude descubrir mejor la gastronomia china: sopas de fideos exquisitas, pescado fresco del rio, unas naranjas tamaño nuez con un sabor asombroso... todo tipo de delicias que no habria descubierto por mi mismo.

Asi acababa mi andadura por China. Y no puedo dejar sin mencionar la amabilidad de los chinos, que pese a las dificultades de no hablar el mismo idioma, siempre aparecia alguno con alguna nocion de ingles dispuesto a ayudar.

Tras cruzar la aduana y coger el metro de vuelta a Hong Kong, me faltaba por visitar el famoso pico Victoria (The Peak) desde donde se puede contemplar la ciudad desde lo mas alto de la isla de Hong Kong. Alli, despues de la subida en funicular (como el de Artxanda pero lleno de chinos), en la torre del pico, era el momento de relajarse tomando un batido de mango en el restaurante Bubba Gump (no pude resistirme!).


Y con esto se acaba la aventura asiatica y pasamos a un nuevo continente: Oceania. Mi primer viaje al hemisferio sur.

5 comentarios:

  1. Jon!!! esto si son aventuras y no las de Tintín...xDD
    me encanta el blog, cada poco miro a ver si nos cuentas algo nuevo.
    Teneis fotos increibles.
    un beso muy fuerte!!
    Por cierto, sigues sin darme nada, nada de envidia... :p

    un besuuu!!!

    Inés.

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  2. Hola Jon!
    Ya me he puesto otra vez al dia con tu blog! Impresionada por tanta aventura...y unas fotos estupendas. Me alego de que sigas disfrutando tanto.
    Un beso.
    Nieves.

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  3. Pues que quieres que te diga, esta compañía que te has echao me gusta muchisimo más que los dos murlacos que llevas a menudo. Se vé que estos nublan tus encantos hasta tal extremo que espantan a las buenas compañías.

    Y ahora a cangurolandia, que casi casi será como estar por casa después de pasar por Asia. Le vendrá bien al de verde para recuperar cintura.

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  4. En efecto, es como estar en casa, pero tb en lo q a precios se refiere. Asiq nuestra dieta de supermercado (pasta y arroz), no esta ayudando a ganar kilos xD

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  5. Jon!!!

    Qué buena que estuvieras con esta chica!!! La verdad qué de cosas te están pasando!! Me alegro que tu excursión en solitario terminara tan bien.

    A ver qué tal en Australia!!!
    Besotes

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